La palabra: ese mosaico mágico que nos permite enhebrar ideas,
pincelar sueños y dibujar emociones.
La palabra tiene el poder de unir o separar, de calmar o enardecer,
de elevar o hundir en negras profundidades.
Hoy esa palabra forma una pequeña cadena que podría eslabonarse
indefinidamente.
2 comentarios:
Anónimo
dijo...
La Palabra, como el Tiempo, no descansa... no muere... se eslabona permanentemente para develar pensamientos, delinear fantasías, gritar sentimientos... o disfrazarlos. La Palabra se encadena... ¡sin cadenas! ¡Adelante con tu Palabra! Ana
2 comentarios:
La Palabra, como el Tiempo, no descansa... no muere... se eslabona permanentemente para develar pensamientos, delinear fantasías, gritar sentimientos... o disfrazarlos.
La Palabra se encadena... ¡sin cadenas!
¡Adelante con tu Palabra!
Ana
Ana, qué hermosa definición de la palabra, gracias por compartirla. Un abrazo Gloria
Publicar un comentario