sábado, 31 de julio de 2010

El sol

Esta brisa de otoño se despereza lentamente dando voz a un soneto.


 Tengo una  leve sospecha, el sol me ama
Sus rayos hechizan mi piel cada día
Y estiran sus dedos luz hacia mi cama
Haciendo huir las sombras en cobardía

La penumbra escapa en mágica calma
Yo aún trémula,  resisto todavía
El sol besa cada fibra de mi alma
Hasta que inunda mi ser de energía

Cómo  podría yo escapar del sueño
Sin la tibieza de amante genuino
Si me cobija con manos de dueño

Si me invita a reiniciar mi camino
Abro mis ojos a la chispa que regala
Vida a mi ser, y la abulia resbala.

sábado, 24 de julio de 2010

Cuento del futuro

Una brisa con voz futurista se deja caer en nuestro presente


- Abuela, repetí otra vez ese cuento de cómo vivías cuando eras joven.

- ¡Qué buenos tiempos! Mi transporte me llevaba flotando en el aire fresco de abril del 2050. Recuerdo haber visto desde mi Burbuja Aerodinámica la ciudad de Tureña pendiendo entre dos precipicios  sostenida sobre una plataforma invisible de cuarzo traslúcido.
Aquella realidad que te parece cuento, hoy veinte años después se perdió. Habíamos alcanzado tal nivel de progreso que los sueños más surrealistas eran posibles a través de la ciencia y la tecnología.
Se podía conocer la cordillera de los Andes por dentro a través de trenes transparentes y silenciosos que  surcaban el interminable túnel con estaciones que semejaban mcicro-ciudades luminiscentes, atestadas de personas y lugares atentos a satisfacer los más caros caprichos.
La música y el color eran paradisíacos y los jardines artificiales superaban la belleza primigenia de la madre naturaleza.
De la misma manera se podía explorar el fondo del mar y disfrutar de la vista exquisita de sus abundantes variedades de flora y fauna, a través de esos submarinos traslúcidos que unían  estaciones sub-acuáticas dignas de imaginaciones privilegiadas con atracciones que variaban desde paseos en tiburones amaestrados hasta danzas con angelicales sirenas de carne humana y cola de pescado.
Mas, cada vez teníamos más diversión, mejores entretenimientos, más magia y magnificencia y a la vez, la malicia, el maltrato, el maquiavelismo y la muerte merodeaban a una multitud morbosa y minada.
Por ello, sucedió aquel terremoto devastador del 2060 que sacudió al mundo en una sucesiva cadena de derrumbes, hundimientos, aludes e inundaciones. Y como un castillo de naipes, el progreso  alcanzado desapareció y yo, que hoy tengo 80 años y fui una sobreviviente testigo del apabullante progreso, no puedo creer que, como en un movimiento pendular de la vida, pasemos del mini-móvil Burbuja aérea, a ser transportada en este carro tirado por estos escuálidos caballos.

jueves, 22 de julio de 2010

Frío

La brisa hoy, es gélida hasta el punto de congelar hasta las ideas, por eso sólo comparto imágenes.


jueves, 15 de julio de 2010

Una sombra olvidada

 Un hilo de brisa osa  incursionar en el relato breve.


El brujo salió tan apurado que olvidó su sombra sobre la pared.
Cuando el padre Sol invadió la habitación y vio la sombra tiritando de ausencia, la abrazó con ternura sin darse cuenta que ella no soportaba su luz.

lunes, 5 de julio de 2010

La vida

Esta vez, la brisa se sienta en la copa de un árbol desnudo y reflexiona.


La vida enlaza vivencias, recuerdos, esencias, sabores.
Con entusiasmo entrama imágenes, sonidos, valores.

La vida enreda tempestad y calma en el mismo ovillo.
Y acumula tiempo y enjaula distancias en nudo sencillo.

La vida liga presencias y ausencias en una sola maraña.
Con habilidad enrolla éxitos y fracasos en la misma artimaña.

La vida hilvana despojos de llantos y borda consuelos.
Traviesa disfraza la verdad de mentira causando revuelos.

La vida disfruta  de ensortijar la madeja.
Y si no aprendemos a jugar, nos aplasta y se aleja.